He vuelto al lugar donde nací y del que siempre me he sentido parte aun habiendo estado sin visitarlo 10 años. Y es que he vuelto a mi tierra a la que, a pesar de mi acento murciano, pertenezco. Por mi amor al mar, a su gente, su arte, su pescaíto frito, sus coquinas y demás mariscos, su acento, sus playas, sus exageraciones (y mías), su simpatía y por todos los momentos que a lo largo de 20 años hemos ido recordando con el cariño y la ilusión de poder revivirlos juntos otra vez.
Solo faltas tú, que lo vives con nosotros en cada momento, en cada pequeño recuerdo.